Tiramisú de mango sin azúcar

Esta receta es un poquito más laboriosa, pero el resultado bien merece la pena.

El tiramisú es un postre irresistible, pero extremadamente rico en grasa y azúcar como para ser considerado saludable. Así que esta versión, siguiendo los principios de este blog, utiliza ingredientes bajos en grasas, frutas para endulzar y cereales integrales.

Ideal para agasajar a papá en su día.

Espero que os guste (y que mis ancestros italianos me perdonen) ?

Ingredientes:

Para los bizcochos:

1 tacita de copos de avena integral.
1 plátano bien maduro.
2 yemas.
2 claras batida a punto de nieve.

Para la crema:

2 huevos.
150 gr de mango bien maduro.
1/2 tacita de pasas sultanas remojadas.
250 gr queso fresco batido, tipo quark.
150 gr de queso de untar desnatado.

Café descafeinado para mojar los bizcochitos.

Cacao en polvo sin azúcar, para adornar.

Preparación:

Bizcochos:
Poner en el vaso de la batidora el plátano, los copos de avena y las yemas. Triturar todo junto. Aparte batir las claras a punto de nieve y agregar a la preparación anterior mezclando suavemente. Disponer sobre un molde forrado de papel de cocina porciones con forma de bizcochitos tipo Lady finger. Hornear 12-15 min a 180ºC.

Crema:

Batir juntos los quesos con las yemas, el mango y las pasas previamente remojadas y escurridas. Batir las claras a punto de nieve e incorporarlas suavemente a la preparación de los quesos.

Montaje:
Mojar los bizcochitos en el café. Poner en el fondo de una copa una pequeña capa de crema. Disponer un bizcocho sobre la crema y cubrir con otra capa de crema. Alternar capas de crema y bizcocho hasta agotar los ingredientes. Adornar con un poco de cacao en polvo, espolvoreando con un colador fino.

Trucos:

La medida de una tacita es la de un vaso de yogur de 125 gr, vacío.

El mango tiene que estar bien maduro y dulce. Si no es temporada de mangos, puedes sustituirlo por otra fruta amarilla y dulce, como melocotón o melón. Un recurso infalible es el plátano, pero se oxida y la crema se oscurece un poco (sin ninguna repercusión en el sabor ni en sus propiedades, por supuesto).

Este postre está mucho más rico si lo dejamos reposar en frigorífico de un día para otro, pero luego hay que consumirlo en el momento. No conviene guardarlo mucho tiempo, que lleva huevo crudo.